WOM, la operadora de telecomunicaciones, ha puesto sobre la mesa varias opciones para su salvataje durante su proceso de reorganización bajo el Capítulo 11 del Tribunal de Quiebras de Delaware. Aquí te contamos los detalles de las estrategias que podrían definir el futuro de la compañía.
Todo puede pasar en el proceso de reorganización de WOM bajo el Capítulo 11 del Tribunal de Quiebras de Delaware. La jueza Karen B. Owens obligó a la compañía a exhibir documentos solicitados por la contraparte, lo que ha revelado varias opciones sobre la mesa para su salvataje.
WOM explicitó cuáles son sus opciones de salvataje y la importancia de estar en suelo estadounidense para salir victorioso del proceso. "Los deudores (WOM) tienen la intención de lanzar un proceso de reestructuración de entidades afiliadas. Cada una de las entidades chilenas tendría que proceder en casos separados ante jueces distintos, lo que conduciría a innumerables ineficiencias y posibles inconsistencias en la administración del caso y la resolución final del patrimonio", sostuvo la empresa.
WOM también alegó que bajo el Capítulo 11 existe la flexibilidad para ejecutar un proceso de venta administrado por el tribunal. "La ley chilena no tiene un procedimiento claro para un proceso autorizado por un tribunal para comercializar los activos de un deudor en el contexto de un procedimiento de reorganización. Además, los activos vendidos durante un procedimiento de reorganización no se venden libres de gravámenes y las posibles contrapartes de transacciones están familiarizadas con el proceso del Capítulo 11 y las protecciones que éste brinda a los postores."
Pese a que Thor Bjórgólfsson, el presidente de Novator Partners, es el rostro más visible de la mesa directiva de la compañía, otro miembro decidió participar en calidad de testigo: Thomas Leslie. En su declaración, explicó que a partir de noviembre de 2023, la mesa directiva comenzó a buscar un plan para evitar la insolvencia de la compañía, involucrando tanto a Santander como a JPMorgan como contrapartes.
En enero de 2024, Novator negoció un préstamo a los accionistas de US$ 95 millones con el banco español, pero las conversaciones se vieron truncadas debido a las condiciones impuestas. "Como resultado, el 6 de marzo de 2024, Novator informó a JPMorgan que no podría obtener los fondos necesarios para cumplir con las condiciones del refinanciamiento, y la compañía pasó a buscar estructuras de refinanciamiento alternativas", dijo Leslie.
La compañía explicó que el banco de inversión Rothschild tiene una lista de 98 interesados en entrar en el plan de salvataje de la empresa, que incluye desde inyección de recursos hasta una eventual adquisición. "Los deudores (WOM) y Rothschild ya tienen una lista de 98 partes potenciales que creen que podrían estar interesadas y que tendrían los recursos financieros para consumar una transacción de reestructuración integral", sostuvo la empresa ante la jueza.
WOM argumentó que para continuar con el plan, es imperativo estar en un procedimiento en Estados Unidos y no en Chile. Entre las razones más importantes, WOM alegó que las leyes chilenas tienen una "incapacidad" de incluir entidades extranjeras en una reestructuración. "Los deudores Kenbourne y NC Telecom II son entidades domiciliadas en Luxemburgo y Noruega, respectivamente, y los deudores domiciliados en el extranjero no pueden reorganizarse bajo la Ley de Insolvencia de Chile", alegó.
Otro punto crucial es que la ley norteamericana tiene la "capacidad" para administrar conjuntamente a todos los deudores en una sola reestructuración, dado que WOM no solo es WOM S.A., sino que tiene varias filiales. "La ley chilena de insolvencia no permite la administración conjunta de procedimientos, lo que podría generar inconsistencias y complicaciones adicionales", explicó la defensa.
Con miras a la audiencia en la que se decidirá el destino de la compañía, programada entre el 20 y 21 de junio próximos, WOM adelantó parte de su estrategia en objeción a la petición de los acreedores ad hoc que buscan llevar el proceso de reorganización a Chile. "Los deudores se verían privados de sus mejores y más eficaces oportunidades de maximizar el valor para sus acreedores. Dadas las limitaciones en un procedimiento de reestructuración chileno, WOM no necesariamente tendría todos los procedimientos de licitación disponibles diseñados para generar ofertas competitivas", expresó la defensa de la compañía.
La situación de WOM es compleja, pero las múltiples opciones de salvataje y la flexibilidad del Capítulo 11 ofrecen una esperanza para la operadora de telecomunicaciones. Con casi 100 interesados en su plan de reestructuración, la próxima audiencia será crucial para determinar el futuro de la compañía y sus operaciones en América Latina.