En un mundo cada vez más digital, la seguridad de nuestras transacciones en línea nunca ha sido tan crucial. La Ley de Fraudes, Ley 21.234, promulgada en 2020, surge como una fortaleza ante el aumento de los delitos cibernéticos, protegiendo a los usuarios de medios de pago electrónicos. Aquí te contamos todo sobre esta ley y su impacto hasta la fecha.
La Ley de Fraudes aplica a:
- Tarjetas de crédito 💳
- Tarjetas de débito 💳
- Tarjetas de prepago 💳
- Cualquier sistema de pago electrónico similar 💻
Incluye también las transacciones electrónicas, entendidas como cualquier operación financiera realizada digitalmente que genere cargos, abonos o giros de dinero.
Si te enfrentas a un extravío, hurto, robo o fraude de tu medio de pago, debes:
1. Notificar de inmediato a tu entidad financiera. 📞
2. Recibir un código de seguimiento para tu caso. 📝
3. Esperar el bloqueo inmediato de tu medio de pago. 🔒
4. Recibir un comprobante de la notificación. 📄
Tienes 30 días para identificar y reclamar operaciones no autorizadas realizadas hasta 120 días antes del aviso de fraude.
La entidad financiera tiene 5 días hábiles para restituir los fondos por montos hasta 35 UF, y 7 días hábiles adicionales para montos superiores. La rapidez de este proceso es un pilar de la ley, aunque ha generado debates sobre su posible abuso para cometer autofraude.
Desde su implementación, la ley ha sido un salvavidas para muchos, pero ha encendido alarmas en el sector bancario. Los bancos y la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) expresan preocupación por un posible incremento del autofraude, aprovechando las protecciones que la ley ofrece.
El presidente de Banco Estado reveló que, hasta noviembre, se han pagado más de US$120 millones en reclamos bajo esta ley, un impacto significativo en sus aportes al fisco. Además, según datos recientes, los casos de usuarios que desconocen operaciones han aumentado un 114%, con montos que superan los US$ 266 millones. Ante estas alarmantes cifras, Claudio Ortiz, presidente ejecutivo del gremio, señaló a DF que “el sistema financiero vive una verdadera emergencia que es necesario abordar”.
La ley, si bien protege, también ha abierto un debate sobre su posible optimización para evitar abusos. Mientras algunos argumentan que facilita el autofraude, otros defienden su importancia en la protección del consumidor.
Mientras la ley ha demostrado ser un avance significativo en la protección de los consumidores, el aumento de los reclamos y el debate sobre el autofraude sugieren que podríamos ver ajustes futuros para equilibrar la protección al usuario con la prevención del abuso del sistema.
La digitalización de nuestras finanzas trae consigo desafíos únicos, y la Ley de Fraudes es un paso crucial hacia una mayor seguridad. Pero, como toda medida, requiere revisión y adaptación continua para asegurar que cumpla su propósito sin abrir puertas a nuevas formas de delito.
Si deseas conocer cómo Sheriff puede convertirse en tu aliado en la gestión de riesgos financieros, ¡descúbrelo aquí! 🤠👉 Conoce Sheriff aquí