El sector agrícola en Chile enfrenta una situación alarmante marcada por la crisis hídrica, con un aumento significativo en el número de empresas quebradas en los últimos ocho años. La escasez de agua ha puesto en riesgo la sostenibilidad financiera de cientos de compañías, generando preocupación tanto en el ámbito público como en el privado.
El presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Antonio Walker, ha advertido sobre el impacto directo de la sequía en la producción agrícola y la disponibilidad de agua para riego. Esta situación ha llevado a una tendencia preocupante de falta de producción y escasez de recursos hídricos, afectando la rentabilidad y viabilidad de las empresas del sector.
Según datos de la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento, en los últimos ocho años se han registrado un total de 364 solicitudes de liquidación y 49 solicitudes de reorganización por parte de empresas agrícolas. Aunque las cifras de 2023 mostraron una ligera disminución en comparación con el año anterior, el número de empresas en problemas financieros sigue siendo significativamente alto.
Los factores externos, como la pandemia, los conflictos internacionales y el aumento de la inflación, han contribuido a la crisis financiera del sector agrícola. Sin embargo, muchos actores de la industria señalan al cambio climático y la crisis hídrica como los principales desencadenantes de la situación actual. La falta de precipitaciones y el déficit pluvial han provocado pérdidas millonarias y recortes en los cultivos, exacerbando los problemas financieros de las empresas.
Ante esta situación, la SNA ha instado a tomar medidas urgentes para abordar la crisis hídrica y garantizar la sostenibilidad del sector agrícola a largo plazo. Esto incluye una inversión acelerada en infraestructura hídrica, como la construcción de embalses, desaladoras y plantas de reuso de agua. Es fundamental que Chile se adapte al cambio climático y priorice la gestión responsable del agua para evitar un mayor deterioro en el sector agrícola.
🌱 La crisis hídrica representa un desafío urgente que requiere una respuesta coordinada y efectiva por parte del gobierno, las empresas y la sociedad en su conjunto. Es crucial tomar medidas concretas para garantizar el acceso sostenible al agua y proteger la viabilidad del sector agrícola. La inversión en infraestructura hídrica y la implementación de prácticas de gestión del agua son pasos fundamentales hacia un futuro más resiliente y próspero para la agricultura en Chile.
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